martes, 3 de mayo de 2011

Es un extraño y hermoso mundo (Parte III)

El Mundo Midori

Prosigo después de tanto tiempo sin volver a escribir, no encontraba la inspiración para continuar con este mundo hasta hace poco.

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Después de todo ese sangriento escenario anterior entramos a un hermoso parque, en él se escucha el cantar de los pájaros, hay niños riendo, el agua fluyendo de una fuente cercana, todo esto opaca el ruido de la estresante ciudad, todo en perfecta y magnifica armonía pero sin embargo, y pese a todos estos sonidos es una tranquilidad y una paz enorme estar en este casi mágico lugar.

Se preguntarán qué demonios tiene que ver un parque con este mundo, pues bien… Este es el mundo Midori, el mundo verde, el mundo de la tranquilidad, de la felicidad que es estar un día relajado en un parque, en un sitio tranquilo disfrutando de lo maravilloso que es la naturaleza, caminar o simplemente tumbarse en la hierba y sentirse vivo, sin ningún tipo de preocupación ni maldad, esto es el mundo Midori.

Mientras más nos adentramos notamos que suena una suave melodía y un dulce cantar de una mujer joven, esta melodía transmite mucha paz y más tranquilidad que la que se encuentra en este mundo, es una melodía que atrapa, que enamora, sí... Algo de amor tiene este mundo también, sino no fuese tan pacífico, este lugar es al que me abrazo después de la tormenta, después de la infelicidad, lo que viene después, es este lugar.

Por lo que les recomiendo que tranquilamente sigamos deleitándonos con el cantar de esta hermosa mujer a la cual ahora observamos escondidos para no interrumpir su angelical canción y admirar lentamente su frágil belleza.

Ella… Su nombre es Bastet, sus alas son verdes pero no un verde común como el de la hierba, no… Es un verde del cual me hace estar seguro que muchas mujeres envidiarían para sus vestimentas, es un verde puro, sincero, amoroso y sobretodo, es un verde de paz, de curación, ella siempre esta aquí para curar mis heridas, para secar mi llanto, me eleva y me dice que todo estará bien, en la vida se sufre mil veces pero gozas lo mismo y a veces hasta más, siempre me recuerda que la vida continua estés tu ahí o no.

Se acaba su dulce canto, nos mira con la mas dulce, pacífica y relajante de sus sonrisas, es una de las pocas personas que se alegra de vernos, que no quiere hacernos daños, su amor es sincero y leal, hacen falta personas como ella en el mundo por eso la incluyo en el mío, porque no es una persona, es mi ángel especial y siempre estará aquí conmigo.

Simplemente se ríe y discreta pero juguetonamente me toma de la mano para llevarme fuera del parque, fuera de todas las personas, a un lugar donde nos encontremos solos los dos, me mira... Es la pureza en persona, es la parte inocente que no quiero que nadie vea, es la parte que sufre cuando me entrego, es la parte que menos quisiera dañar por eso la tapo con tantas cosas, por lo sumamente hermosa y frágil que es no se la muestro a nadie soy muy celoso con ella, siento su dedo en mi boca… Me dice que lo haga, que me entregue, que todo estará bien… Yo dudo, pero al final siento su suave mano acariciando mi mejilla y sus dulces labios besándome, cedo... Quizás después de todo ya sea tiempo, la sujeto entre mis brazos firmemente dejándome absorber por su delicado cuerpo y me levanto… No me queda de otra, hay que seguir adelante.

Me acerco de nuevo a ustedes y les digo que nos tendremos que adentrar a otro mundo, vagando por la mente humana nos hemos encontrado muchas cosas pero nada como lo que nos espera, me digo a mi mismo no comentar lo que pase por ese mundo pese a sus miradas curiosas, no les daré el lujo de saber los verdaderos sentimientos de esta dama por mí.

Continuará…

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Pido disculpas nuevamente por la tardanza, me ha costado mucho escribir sobre temas bonitos y el que se viene lo es aún más, pero gracias a los pocos que me leen.

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